Artículo de opinión de Belén Rosado.

Tenemos un grave problema: la despoblación y falta de oportunidades.

A lo largo de los siglos nuestra provincia ha ido sobreviviendo al paso del tiempo, ya en la Edad Media las infranqueables murallas de Ávila solo podían ser dominadas con un prolongado asedio o por el descuido de los defensores. Y ese fue el momento que escogieron los batallones enemigos. Mientras las tropas abulenses se encaminan al Puerto de Menga, engañados, llevándose a todos los hombres con edad de luchar y emprender una batalla por sorpresa. Los atacantes deciden asaltar la ciudad por otro frente, al creerla indefensa y lo que no esperaban es que se hubiera nombrado gobernadora a la brava Jimena Blázquez y deciden atacar la muralla. Con los primeros movimientos de guerra, Jimena recluta a todas las mujeres y se visten con ropajes de guerreros, colocándose en los sitios visibles de la muralla con antorchas encendidas, gritando y tocando las trompetas de guerra. Ante elsuceso de que Ávila se encuentra bien protegida, los enemigos ni siquiera intentan el asedio.

Jimena había salvado a la ciudad y a partir de este momento, las mujeres abulenses tuvieron el privilegio de participar en las reuniones del Ayuntamiento, y así, se ha contado durante generaciones.

HOY, el ejército enemigo se llama despoblación y la falta de oportunidades asedia a la Muralla. HOY, más que nunca necesitamos una Jimena que lidere el cambio y que marque la estrategia de batalla. HOY, necesitamos antorchas encendidas, gritar y tocar las trompetas de diálogo. HOY, necesitamos infraestructuras sin peaje, trenes a 1 hora de Madrid, industrializarnos, radioterapia, potenciar nuestro Parque Regional, dinamizar el turismo y patrimonio y que nuestros jóvenes, no se encuentren en peligro de extinción.

HOY, somos todos, parte de esa transformación, del gran Big data abulense que nos une desde los celtas hasta ahora, del ADN común, que no nos permite abandonar nuestra tierra a su destino sino guiarlo hacia las oportunidades, y con 6 millones y medio de habitantes a tan sólo una hora y nuestra espectacular naturaleza, ser bioesfera madrileña, se convierte en nuestro grial, convertirnos en el vergel de paz frente a la gran urbe ruidosa, deberíamos pensar en cual debe ser nuestra industria, nuestras infraestructuras, nuestra educación y nuestra sanidad, todo llevado hacia ser ese espacio verde, un museo natural abierto patrimonio de la Humanidad, con turismo familiar dotado de instalaciones para ser el destino preferido en turismo rural, dotándonos de servicios innovadoresy todo ello desde un espacio de reflexión y diálogo creado para ese fin.

HOY, ante la amenaza, toca ponernos en las zonas visibles de la muralla, con ropajes de guerreros para reivindicar todo lo que se nos prometió y ser capaces de construir una Nueva Ávila 2019.