El Grupo Municipal de Ciudadanos ha criticado que, ya iniciado el verano, el 60 por ciento de las fuentes de agua de boca que existen en la ciudad no funcionan. A juicio de la formación naranja, se trata de una muestra más de la desidia del Equipo de Gobierno conservador a la hora de mantener y conservar el día a día de la capital abulense y denota la falta de previsión de la que hace gala el PP.
El concejal de Ciudadanos Pedro Cabrero ha solicitado en comisión que se pongan en servicio las fuentes cerradas, que se reparen las rotas y que se retiren las que están inutilizadas. Tan solo 16 fuentes públicas en toda la ciudad funcionan, y dos de ellas lo hacen con deficiencias por desagües atascados o faltas de presión. Un número a todas luces insuficiente para dar servicio a los abulenses y a los turistas en estos días estivales.
Ciudadanos ha denunciado que, de las 41 fuentes de agua de boca existentes en la ciudad, ubicadas principalmente en la zona centro y en parques y jardines de Ávila, 25 de ellas no funcionan por diferentes causas, como carecer de desagüe o que éste esté atascado, daños ocasionados por actos vandálicos, grifos rotos o llaves de paso afectadas por heladas que, a día de hoy, siguen sin reparar. Además, cuatro de ellas no han funcionado nunca.
A juicio de la formación naranja, especialmente grave son los casos de las fuentes averiadas en parques infantiles con gran afluencia de niños como el del Jardín del Recreo o el del parque Infantil de Tráfico en San Antonio, o el de la fuente ubicada en la plaza del Rollo, también junto a una zona de columpios, que se cerró porque un particular se quejó de que los niños jugaban con globos de agua, según consta en los informes técnicos municipales.
Pedro Cabrero ha criticado que “cuando no se lleva un mantenimiento periódico de la ciudad, como es este caso o el de las aceras o de las señales de información turística, por ejemplo, que se puede ejecutar con un presupuesto asequible, se genera una ciudad abandonada, con un gasto en inversiones que solo han servido para la foto y captación de votos y para despilfarrar dinero público, ya que obliga a hacer una segunda inversión para ponerlo de nuevo en funcionamiento”.